Según los medios italianos, el volcán Etna, que se encuentra en la isla de Sicilia, nuevamente muestra signos de actividad. El lunes, el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología de Italia registró explosiones y descargas de cenizas en la parte sureste del volcán, lo que, sin embargo, no afectó el funcionamiento de las aerolíneas. Solo el aeropuerto de la ciudad de Catania (Catania) por razones de seguridad cerró dos pistas.
Los científicos y expertos afirman que la actividad actual del volcán más alto de Italia aún no ha alcanzado el nivel en el que es necesario temer por los lugareños. Sin embargo, el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología señala que los dos puntos donde ocurrieron las explosiones y emisiones de cenizas se conectaron en un cráter. Allí, se notaron pequeñas erupciones de lava ardiente.
El volcán Etna, que sorprendió a los turistas con su altura (3350 metros) y su belleza inusual, mostró signos de actividad a principios de este mes. Entonces, hace más de dos semanas, los aeropuertos locales dejaron de funcionar temporalmente debido a la gran cantidad de cenizas emitidas por el volcán. A finales de octubre, el poderoso Etna arrojó nubes de cenizas que colgaban durante mucho tiempo sobre los asentamientos vecinos y las ciudades de Taormina y Catania. Pero la actividad sísmica del volcán en ese momento era ligeramente más fuerte que en los últimos días. Luego, las explosiones y pequeñas erupciones de lava fueron acompañadas por un terremoto menor pero notable.
La erupción más terrible y a gran escala del volcán más alto de Europa ocurrió el 11 de marzo de 1669. Según los historiadores, el Etna se enfureció hasta mediados del verano o incluso hasta el final del otoño. Los numerosos terremotos más fuertes formaron una especie de cono cerca de la ciudad de Nicolosi, que hasta el día de hoy se puede ver en una de las laderas del volcán. Se cree que en 1669, el volcán Etna arrojó al menos 800 millones de metros cúbicos de lava mortal, lo que cambió por completo la configuración de la costa y se cobró la vida de 20-100 mil personas.
Hoy, los medios afirman que Etna no es el único volcán activo. Entonces, en El Salvador, el antiguo volcán Chaparrastica muestra signos de actividad, lo que conlleva una amenaza mucho mayor que el Etna, que está relativamente tranquilo hoy. Las autoridades locales ya han decidido evacuar con urgencia a 2.200 residentes locales y han declarado el nivel más alto de peligro anaranjado en la región. Ayer, el volcán, que se despertó por última vez en 1976, arrojó una columna de cenizas, humo y vapor, a 5 kilómetros de altura. Los médicos temen que tal mezcla pueda causar infecciones respiratorias graves, pero hasta ahora solo dos personas han recurrido a los médicos.
Los vulcanólogos sugieren que la erupción del volcán Chaparrastica podría conducir al llamado "invierno volcánico". El ejemplo más llamativo de este fenómeno fue el "año sin verano", que siguió a la poderosa actividad del volcán Tambora en una de las islas de Indonesia en 1815. Luego, una cantidad extremadamente alta de azufre y cenizas cayó en la estratosfera, lo que provocó cambios significativos en el clima de la región. El verano de 1816 nunca llegó. Fue reemplazado por fuertes lluvias y nevadas, y en mayo hubo heladas que destruyeron por completo toda la cosecha.
"Un año sin verano" tuvo un fuerte impacto en el clima global, reduciendo la temperatura anual a 2.5 grados centígrados, provocó un fuerte aumento en los precios de los cereales y también causó una terrible hambruna que cobró la vida de muchos.
